martes, 16 de febrero de 2016

Copla II, Lope de Vega

Ir y quedarse, y con quedar partirse,
partir sin alma y ir con alma ajena,
oír la dulce voz de una sirena
y no poder del árbol desasirse

arder como la vela y consumirse
haciendo torres sobre tierna arena;
caer de un cielo, y ser demonio en pena,
y de serlo jamás arrepentirse;

hablar entre las mudas soledades,
pedir pues resta sobre fe paciencia,
y lo que es temporal llamar eterno;

creer sospechas y negar verdades,
es lo que llaman en el mundo ausencia,
fuego en el alma, y en la vida infierno.

Este poema me ha gustado mucho porque es una constante contradicción. Me explico, el autor niega en cada verso lo que ha dicho anteriormente (caer de un cielo y ser demonio en pena), lo que le da mucho ritmo y dinamismo al poema. Se producen esas contradicciones para expresar, según el autor, que el amor es ciego y que todo aquel enamorado es guiado por su amor (oír la dulce voz de una sirena y no poder del árbol desasirse).

El tema principal del texto es el amor con locura. Es por ello que se nos presenta el tópico Furor Amoris, o sea, amor apasionado en el que no se impone la razón, sino la locura amorosa. En el poema aparecen anáforas al final de las tres primeras estrofas cuando se repite la conjunción “y”. También aparece una anadiplosis en los dos primeros versos (partirse, partir) y varias antítesis y paradojas en el conjunto del poema (ir y quedarse, partir sin alma y ir con alma ajena, caer de un cielo y ser demonio en pena).



Biografía
Lope de Vega nació en 1562 en Madrid y estudia en Alcalá de Henares. Tuvo una gran capacidad creativa y muy mujeriego. Fue ordenado sacerdote en 1614 y en sus últimos años vivió graves problemas económicos y personales.