Érase un hombre a una nariz pegado,
érase una nariz superlativa,
érase una nariz sayón y escriba,
érase un pez espada muy barbado.
Era un reloj de sol mal encarado,
érase una alquitara pensativa,
érase un elefante boca arriba,
era Ovidio Nasón más narizado
Érase un espolón de una galera,
Érase una pirámide de Egipto;
las doce tribus de narices era.
Érase un naricísimo infinito,
muchísimo nariz, nariz tan fiera,
que en la cara de Anás fuera delito.
He escogido este poema porque me ha resultado gracioso el hecho de que Quevedo le dedique este poema a Góngora, con el cual mantenía una relación conflictiva. Se trata de una crítica constante a la nariz de Góngora, pues como se puede apreciar en los diversos retratos en los que aparece, poseía una nariz bastante alargada y fina, con el fin de que se sienta ridiculizado.
Se aprecian mayoritariamente anáforas (érase... érase...) y hipérboles, ya que exagera de manera desmesurada el tamaño de la nariz de Góngora (a una nariz superlativa). También abundan las metáforas (érase un pez espada muy barbado).
Biografía
Quevedo nace en 1580 en Madrid, en una familia noble. Recibe su educación el el colegio de los Jesuitas y posteriormente estudia en la Universidad de Henares. Sirvió al Duque de Osuna en diversas misiones hasta que el Duque cayó y él fue desterrado. Con la llegada al trono de Felipe lV se le retiró el destierro. En 1639 fue encarcelado y se retiró a Villanueva de los Infantes, donde murió en 1645.
érase una nariz superlativa,
érase una nariz sayón y escriba,
érase un pez espada muy barbado.
Era un reloj de sol mal encarado,
érase una alquitara pensativa,
érase un elefante boca arriba,
era Ovidio Nasón más narizado
Érase un espolón de una galera,
Érase una pirámide de Egipto;
las doce tribus de narices era.
Érase un naricísimo infinito,
muchísimo nariz, nariz tan fiera,
que en la cara de Anás fuera delito.
He escogido este poema porque me ha resultado gracioso el hecho de que Quevedo le dedique este poema a Góngora, con el cual mantenía una relación conflictiva. Se trata de una crítica constante a la nariz de Góngora, pues como se puede apreciar en los diversos retratos en los que aparece, poseía una nariz bastante alargada y fina, con el fin de que se sienta ridiculizado.
Se aprecian mayoritariamente anáforas (érase... érase...) y hipérboles, ya que exagera de manera desmesurada el tamaño de la nariz de Góngora (a una nariz superlativa). También abundan las metáforas (érase un pez espada muy barbado).
Biografía
Quevedo nace en 1580 en Madrid, en una familia noble. Recibe su educación el el colegio de los Jesuitas y posteriormente estudia en la Universidad de Henares. Sirvió al Duque de Osuna en diversas misiones hasta que el Duque cayó y él fue desterrado. Con la llegada al trono de Felipe lV se le retiró el destierro. En 1639 fue encarcelado y se retiró a Villanueva de los Infantes, donde murió en 1645.